Puedo extrañarte
Volar hacia vos
Mientras te sueño
Y respiro de tu aliento
Un atardecer de primavera
Como florecidos jazmines
tu perfume tan presente
Volando suaves mariposas
La vida ante tus ojos
Sin saber lo que demandas
Pues son cómplices amigos
De los ojos de mi alma
La misma Luna nos cobija
La misma tierra transitamos
Te ocultas entre delirios
Muy lejana de mis manos
Tú piel sensible
Tus manos cálidas
Todo te nombra
Sobre mi cama
Tu alma un huracán
Y una ventisca mi alma
Laten para atraerse
Cuando el mar pierde su calma
Pasarán los siglos
Cambiarán los cuerpos
Los relatos de los años
Y quizás sin encontrarnos
Dos extraños siempre fuimos
Que anduvimos separados
Ambas partes del imán
Atrayendo los presagios
De la vida universal
De un destino casi cierto
Separados nuestros cuerpos andarán
Luchando nuestras almas por su encuentro.
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